domingo, 7 de junio de 2015

El dato irrelevante de una gira: "agenda intensa"


Si uno busca en Internet la expresión “intensa agenda”, "nutrida agenda" o "agenda cargada"encontrará infinidad de publicaciones, principalmente redactadas por equipos de comunicación institucional.

El motivo tal vez sea la necesidad más o menos consciente de manifestar que la gestión del organismo o autoridad referida se caracteriza por el esfuerzo de concretar muchos encuentros en poco tiempo.

Ante esa reiteración de “intensa agenda” parece oportuno formularse algunas preguntas:
  • ¿Alguna agenda de una visita oficial no es "intensa"?
  • ¿Hay agendas descomprimidas o flexibles?
La respuesta, evidentemente, es no; por la investidura de las autoridades y la necesidad de comunicar acerca de una buena gestión. Todas las agendas de un viaje oficial son “intensas” o “cargadas”.

Entonces:
  • ¿Aporta información mencionar esa característica?
  • ¿Vale la pena destinar un titular a mencionar que en poco tiempo se concretarán muchas actividades?
Seguramente el lector obtendría mejor información si se difundiera el objetivo de las reuniones, los participantes, y, si ya ocurrieron, los logros concretados. En definitiva, nada aporta decir que una agenda es “intensa”. Solamente es una especie de frase preestablecida que se pronuncia respecto a cada encuentro entre autoridades y no tiene otro valor que el de reiterar lo esperable.

Esta adjetivación innecesaria al agregar "nutrida" o "intensa" al sustantivo "agenda" se podría clasificar en la misma categoría de error que cometemos al reproducir citas textuales en donde el entrevistado se elogia a sí mismo o al organismo que representa.

En todo caso, el objetivo de comunicar las virtudes de un organismo o gestión se cumple cuando el lector puede concluir en que ese desempeño fue virtuoso, a partir de la información proporcionada.

Lecturas recomendadas:
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